El Falso Dilema: Salud o Economía

Por. Jonás Herrera

En este tiempo de coronavirus ha surgido un tema recurrente y es que cuando se habla de la importancia de atender la economía paralelo a la crisis sanitaria, saltan algunas personas, quizás bien intencionadas, opinando que: por ahora la economía debe esperar, que no es tiempo de pensar en ella, que por ahora lo primero es la salud; personalmente en mi twitter me han escrito mucho en ese sentido, cosas como estas:

"Mientras hay salud hay vida, lo económico puede esperar"

"La felicidad radica en tener buena salud, no economía"

"Yo seguiré en cuarentena, aunque sea tortilla con queso comeré, mientras los ricos pensando en la economía"

"Primero la salud olvídese de lo económico"

En filosofía este planteamiento es conocido como una falacia lógica o falso dilema, que se suele presentar como argumento sobre dos puntos de vista como las únicas opciones posibles cuando en realidad existen más alternativas que no han sido consideradas. No es A o B existe también C.

Es importante notar también que en los tuits de arriba los "opinantes" le otorgan un significado erróneo a la palabra [economía], la cual por definición debería ser entendida con estas acepciones:

economía

Del lat. mediev. del gr. οἰκονομία oikonomía, 'casa' y némein 'distribuir', 'administrar'.

1. Ciencia que estudia los métodos más eficaces para satisfacer las necesidades humanas materiales, mediante el empleo de bienes escasos.

2. Contención o adecuada distribución de recursos materiales.

3. Reducción de gastos anunciados o previstos.

¿Entonces por qué este planteamiento es un falso dilema?

Porqué cuando se habla utilizando la palabra [economía] en el contexto de una crisis sanitaria mundial tan inédita como la que estamos viviendo para la cual nadie estaba preparado y que además está cobrando la vida de tantos seres humanos, la acepción de la palabra nos presentaría el argumento extractado así: 

Argumento corto (tuit) 
"Debemos atender la crisis sanitaria al mismo tiempo que atendemos la economía"

Argumento ampliado, uso y entendimiento correcto de la palabra:

"Debemos atender la crisis sanitaria al mismo tiempo que atendemos las necesidades humanas básicas y materiales de las personas, es decir, para que exista [salud] debemos pensar y accionar para que la gente, ante la crisis,  pueda contar siempre con alimento, agua, luz, medicinas, tener vivienda, etc. Debemos contener y asegurarnos que se distribuyan recursos materiales durante la crisis y después de la crisis, en este caso salvaguardar el empleo"

Como se entenderá, hablar de [economía] en tiempo de coronavirus nada tiene que ver con "ricachones" enfermos viendo como consiguen más dinero a costa de la salud, y sin duda los hay y aunque asqueroso ciertamente es harina de otro costal. Lo cierto es que si no se atiende  la [economía] al mismo tiempo que una crisis médica los costos serán muy altos, y me refiero a los costos de salud y en consecuencia de la misma vida. 

Es la economía la que asegura que ante esta crisis los hospitales tengan medicinas, que existan insumos, salarios del personal médico, ambulancias, energía eléctrica para los respiradores, comida y materiales vitales para los que guardan cuarentena en los centros de contención o fuera de estos.

Como vemos en esta gráfica a más crisis sanitaria más crisis económica, entonces, ¿cuándo se debe atender?, de inmediato, y tan es así que el gobierno de El Salvador lo primero que hizo para atender la crisis fue revisar su economía solicitando al congreso 2 mil millones de dólares acaso ¿está mal que el gobierno pensara antes en el dinero? No, ya que sin dinero no se pueden tener los recursos mínimos para salvaguardar la salud y la vida.

Y no importa si comes salmón o tortilla con queso como escribió la persona arriba citada; sin que la [economía] funcione ninguno de estos alimentos llegaría a las casas ya que son recursos y por lo tanto son parte de un ciclo económico, para el caso, el queso ha salido más menos del siguiente círculo económico:

1. La vaca, (o puede ser también la oveja, cabra…), es ordeñada para obtener leche.
2. La leche se filtra y debe homogeneizarse para obtener una textura más uniforme.
3. La leche se le deja cuajar y se forma así la cuajada.
4. Luego se moldea y se prensa bien esa cuajada, y se sala.
5. El queso se deja madurar hasta que esté en su punto.
6. Se lleva en camiones hasta los comercios donde ya lo podemos comprar.

Ella no se percata que, para que ese queso llegara a su mesa intervinieron muchísimas personas y empresas, es decir: comer ese queso con tortilla se logró porque la [economía], que ella dice se debe atender después, funcionó; ahora pensemos ¿qué pasa si no se atiende la economía a la par de la crisis sanitaria? Los recursos materiales vitales no llegarían y en El Salvador estos son generados o distribuidos en su mayoría por la micro, la pequeña y la mediana empresa (MIPYMES), ademas si no se atienden o se contienen con alivios a estas empresas y a sus colaboradores se podrían perder hasta el 85% de los trabajos y en consecuencia de salarios, ¿cree usted que esto no es peor si además también hay una crisis médica?. 

Ahora bien asumamos que el gobierno asegure que se produzca el queso y las tortillas: ¿con qué dinero se van a comprar?, y se entiende que si no se come no hay salud y si no se trabaja no hay salud, y si no hay empresas no se paga impuestos y por lo tanto no hay medicinas en los hospitales y no hay salud... y así esto se convierte en un ciclo perverso de muerte. Y por esto es un #FalsoDilema

Así que cuando se habla de economía ante una pandemia como la que estamos viviendo no se debe entender que se habla de millonarios enfermizos que desean seguir enriqueciéndose, se habla de atender en simultáneo medidas oportunas e inteligentes que deben ser atendidas de inmediato. La economía y la salud no se pueden contraponer. No existe salud sin economía y no existe economía sin salud, ambas mantienen una asociación íntima para beneficiarse mutuamente en su desarrollo vital; atenderla luego es el equivalente a llevarle un respirador al paciente que acaba de morir por el virus y esto: ¿de qué sirve?. 

Pensar distinto es entender por economía algo que no es o esgrimir un falso dilema, o como dirían los filósofos de la lógica: Una falacia del tercero excluido, falso correlativo falsa oposición,​ falsa dualidad, falsa dicotomía, etc. Llámele como quiera, pero no sigamos con el argumento que primero se atiende la salud y luego la economía.

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P.D. No puede aquí ampliar el tema sobre salud, economía y salir de la cuarentena, pero  si decir que existen muchas medidas económicas que se podrían haber tomado sin necesidad de romperla, es decir que el argumento de: "entonces que quieren, salir a trabajar y que nos muramos todos" Tampoco aplica. Atender la economía nunca se contrapone a la salud ya que ambas mantienen una simbiosis única y necesaria.